El Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México es la obra de
infraestructura más relevante del país, que además de convertirse en
un centro de operaciones de clase mundial, será el generador de
empleos más importante de América Latina, destacó el secretario de
Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza.

Al realizar, junto con el gobernador del Estado de México, Alfredo del
Mazo, un recorrido de supervisión de los avances por las distintas
construcciones que forman parte del conjunto aeroportuario, Ruiz
Esparza aseguró que desde este momento es un detonante económico para
el oriente de la Zona Metropolitana de la CdMx y de todo el centro del
país, ya que durante todo su proceso constructivo generará más de 120
mil empleos.

Acompañado por los subsecretarios de Transporte, Yuriria Mascott
Pérez, y de Infraestructura, Óscar Callejo Silva, y del director
general del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, Federico
Patiño, señaló que se desarrollan más de 17 obras de infraestructura
en comunicaciones alrededor de la terminal aérea, que también
fortalecen la conexión y la movilidad en el Valle de México.

En tanto, Alfredo del Mazo ofreció todo su apoyo y el de su gobierno
para la ejecución de la obra, y solicitó que durante su construcción
se privilegie la contratación de gente de la región.

Recorrieron los avances en la construcción de la Torre de Control, la
cual contará con 12 dispositivos o aisladores sísmicos, que permitirán
desplazarse hasta un metro 40 centímetros al edificio durante un
temblor, sin que sufra afectaciones, por encima de lo que marcan los
protocolos, que es de un metro.

La Torre de Control tendrá una altura de 90 metros y un diámetro de
65. Está cimentada por 480 pilotes, llevados de 18 a 22 metros de
profundidad, los cuales van conectados a una gran losa de cimentación
de un metro de grosor, lo cual le dará rigidez al edificio y contará
con todos los estándares de seguridad.

En el Edifico Terminal se han hincado 5 mil 400 pilotes y se colocan
865 losas de 20 por 20 metros, de un espesor promedio de un metro y
medio, en una superficie de 312 mil metros cuadrados, con diez mil
columnas que amarrarán la loza de construcción con el piso de la
terminal. La obra tendrá una dimensión de mil 500 por 600 metros.