Un reporte de la Casa del Migrante de esta ciudad, reveló que mientras
las deportaciones aumentaron de manera considerable entre los años
2017 y 2018, en los mismos años aumentaron a casi el doble los flujos
de migrantes que llegan a esta frontera con la intención de cruzar a
Estados Unidos como indocumentados.

Así, mientras en el 2017 fueron atendidos en dicho albergue 6 mil 897
migrantes, el año pasado la cantidad aumentó a casi el doble, con un
total de 12 mil 224 atenciones,y de total 10 mil 601 fueron mexicanos
repatriados de Estados Unidos, una cantidad elevada si se compara con
los 5 mil 362 repatriados en el 2017, según reveló el director del
albergue, el sacerdote católico Julio López.

Estas cifras presentadas por el religioso indican que las medidas
antinmigrantes aplicadas por el gobierno de Estados Unidos en su
frontera con México, no solo han sido efectivas, sino que han
ahuyentado en mucho los intentos de miles de migrantes de varios
países, que pretenden cruzar de manera indocumentada la férrea
frontera estadounidense.

“Nuestra labor en la casa del Migrante continúa para brindar atención
a estos hermanos que transitan por nuestra ciudad, y respondemos al
llamado del papa Francisco, de atender y acoger a nuestros hermanos
migrantes y a los repatriados”, explicó el religioso.

De los migrantes en tránsito que llegaron a esta ciudad, el año pasado
fueron atendidos mil 623, cantidad que aumentó en solo 88 con relación
al 2017, peo se destaca que de ese total, al menos el 30 por ciento
correspondió a menores acompañados por familiares o adultos.

Asimismo, el sacerdote destacó que el año pasado fue marcado por dos
eventos de mucha trascendencia, como lo fueron las migraciones masivas
de centroamericanos y las migraciones de africanos, que en menor
medida llegaron a la ciudad en busca de una visa humanitaria o de
asilo político por las persecuciones de que son objeto en sus países.

“Estos hecho llamaron la atención, pero de la prensa, pero a pesar de
que las caravanas masivas no llegaron a nuestra ciudad, llegó una
caravana silenciosa representada por un alto número de hondureños que
representaron el doble que los africanos”, explicó el sacerdote.

Sin embargo, comentó que a diferencia de años anteriores, en lo que se
refiere a atenciones por nacionalidades, los mexicanos representaron
el 80 por ciento del total de personas atendidas durante el año
pasado.

Ante la expectativa del arribo de otra caravana de 5 mil migrantes
centroamericanos, dijo el padre López que se cuenta con suficientes
espacios para bridarles atención, ya que el municipio y otros
organismos civiles apoyarán en estas labores de ofrecer alimento,
hospedaje, ropa y atención médica y psicológica.