Esta madrugada, una riña entre internos del Cereso de Las Cruces en
Acapulco dejó como saldo 28 muertos, confirmó esta tarde el vocero de
Seguridad de Guerrero, Roberto Álvarez.
Primeros informes sobre este incidente arrojaron como saldo solo cinco
muertos y un herido, sin embargo tras el operativo se ajustó la cifra
oficial.
Por la mañana el funcionario señaló que tras la alerta se resguardó el
perímetro de la cárcel y la Fiscalía ingresó para dar fe de los hechos
y hacer el respectivo levantamiento de los cadáveres.
Además, aseguró que la riña no afectó a la demás población carcelaria
y no hay evasión de internos.
Hasta el momento, precisó, no se ha corroborado que se hayan producido
disparos de armas de fuego y que las personas que murieron fueron
atacadas con armas punzo cortantes y a golpes.
Al ser informado el gobernador Héctor Astudillo por el secretario de
Seguridad Pública, general Pedro Almazán, se dispuso las medidas de
emergencia para el control del conflicto e instruyó al Grupo de
Coordinación Guerrero para mantenerse en alerta.
Se indicó que las autoridades penitenciarias en coordinación con
elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y de la Fiscalía
General ya reestablecieron el orden.
Participaron en el operativo efectivos de la Policía Estatal, Grupo de
Operaciones Especiales de la Fiscalía, la Gendarmería y el Ejército.
Igualmente, se instaló un cinturón de seguridad en el exterior del
Cereso, auxiliado por dos helicópteros del gobierno estatal.
Según reportes extraoficiales, la gresca fue encabezado por un reo
identificado como “Brayan” y se habría originado porque los reos
fueron notificados de su traslado a otros centros penitenciarios.
Tras la alerta han llegado familiares de los internos al penal, donde
la entrada está resguardada por una veintena de policías.
En redes sociales circulan imágenes de algunos reos decapitados y
destazados, pero sin verificar aún su autenticidad.