En tiempo y forma nosotros presentaremos las iniciativas para cancelar
la reforma educativa y dar a conocer un plan distinto, con un marco
legal ajustado a las nuevas circunstancias, pero se cancelará la
actual reforma, dijo hoy el presidente electo Andrés Manuel López
Obrador.

Durante la conferencia conjunta de gabinetes reunidos en Palacio
Nacional, dLópez Obrador dijo que esta ley será sustituida por otra
que tomará en consideración el punto de vista de maestros y padres de
familia. Mientras esto no suceda, precisó, acataremos lo que está
establecido en la ley y respetaremos el mandato constitucional del
presidente Enrique Peña.

Sin embargo, en materia educativa dijo que «tenemos que convencer, no
vencer», y cualquier cambio requiere la participación de los maestros.

A pregunta expresa sobre el caso de la ex líder del SNTE, Elba Esther
Gordillo, el próximo presidente dijo que hay un proceso legal. Si ella
es declarada inocente libre, se tiene que respetar su derecho de
participación. Nosotros, dijo. vamos a refrentar los compromisos
hechos en campaña.

Aseguró también que Gordillo Morales «no va a trabajar en su gobierno
y que se respetarán los derechos de la ex lider sindical», pero
-subrayó- «nadie va a estar por encima de la ley».

Se refirió a que no intervendrá en asuntos internos de los sindicatos
y el de procurar que haya democracia sindical. «Queremos democracia
para el país, en la escuela, la familia, en los sindicatos; democracia
como forma de vida. En los asuntos sindicales vamos a promover que se
respete la voluntad de los trabajadores, que se practique que en la
decisión de los sindicatos sea el voto secreto».

Por su parte, Peña rechazó lo declarado esta mañana por la ex líder
magisterial al señalar que fue una perseguida política.

Tal asunto, dijo, no fue competencia del Ejecutivo sino un caso
judicial y ahí se tomaron decisiones. «El Poder Juidicial es autónomo
y a él le correspondió. Es inadmisible afirmar que la maestra, cuya
trayectoria es conocida públicamente, y el juicio que presentó haya
tenido un móvil político».

Con relación al tema del nombramiento de los secretarios de la Defensa
Nacional y de la Marina, López Obrador dijo que pedirá el punto de
vista de los actuales secretarios, pero mencionó que los nuevos
funcionarios serán un general de división y un almirante en activo.

Sobre el asunto del aeropuerto, ambos presidentes fueron cuestionados.

Peña Nieto dijo que el proyecto sigue su curso dado que hay contratos
asignados, no se puede frenar y está suscrito como una obligación del
gobierno de la República.

Reconoció que hay ópticas distintas con el gobierno que está por
iniciar pero este proyecto «que inició mi gobierno es una obra que
sería transexenal, que no podemos concluir. Las obras se mantienen y
somos respetuosos de la consulta para tomar una ultima definición
sobre continuar o tomar la opción» de Santa Lucía.

En tanto, López Obrador reiteró que realizará la consulta ciudadana.
Informaremos con objetividad y no inclinaremos la balanza por ninguna
de las opciones, proporcionaremos información con apego a la verdad y
serán los mexicanos quienes decidirán.

En lo correspondiente al estado en que se entrega la administración
pública, Peña Nieto reiteró que deja un país «con estabilidad
política, donde priva clima de armonía y paz social. Reconocemos que
hay regiones con grados de inseguridad, se ha acentuado en algunos
lugares y ha sido uno de los grandes retos el tema de la inseguridad».

En materia económica, agregó, se deja un país con estabilidad donde
crece empleo y una baja tasa de inflación. Destacó niveles de deuda
manejables y razonables. Desde 2015 el nivel de deuda ha decrecido con
respecto al PIB y se hicieron ajustes muy duros, en 2016 y 2017, para
revertir las tendencias de endeudamiento».