Las autoridades no saben qué motivó el tiroteo que se registró el
lunes pasado en una escuela de Italy, un pueblo al norte de Texas,
pero varios estudiantes aseguran que el agresor tiene un historial de
problemas.
El lunes en la noche, al final de una jornada que será difícil de
olvidar para muchos en el pequeño poblado de Italy, en el norte de
Texas, el superintendente Lee Joffre acudió al hospital a visitar a la
estudiante de 15 años que había sido herida en un tiroteo en la
mañana.
Lo acompañó la bibliotecaria de la única preparatoria del distrito,
quien también es su esposa. La adolescente internada en el hospital
Parkland del condado de Dallas, a unas 50 millas de distancia, estaba
con buen ánimo, aseguró el martes Joffre a los medios.
«Estaba de muy buen humor. Contó chistes, tuvo una conversación
completa con nosotros», dijo.
La joven, quien recibió varios disparos, pidió que le llevaran libros
y así lo hicieron. También mandó un mensaje de recuperación y
fortaleza a sus compañeros, dijo el superintendente.
El martes, las clases arrancaron con policías adicionales en la
escuela. Agentes de la Oficina de Alcohol, Armas y Tabaco revisaron el
plantel con perros especializados antes del inicio de la jornada.
Oficiales recuperaron el lunes el arma semiautomática calibre .380
usada en el tiroteo.
En los alrededores de la escuela también circulaban rumores de que el
sospechoso de 16 años arrestado por la balacera había causado
problemas en el pasado.
Cuando iba a llevara su hija, Julia Dávila dijo que la joven le contó
que el sospechoso había sido agresivo con otra estudiante en el
pasado.
«Es duro mandar a tus hijos», declaró la madre.
Otro estudiante le dijo algo similar a la agencia AP. Cassie Shook, de
17 años de edad, aseveró que se molestó cuando se enteró de quién era
el agresor porque se había quejado en dos ocasiones sobre su
comportamiento con la administración.
«Esto puedo haberse evitado», dijo. «Había muchas señales».
Shook aseguró que el joven había hecho un listado de gente a la que le
quería hacerle daño cuando estaban en noveno grado, y aparecía ella.
El año pasado, el adolescente le lanzó unas tijeras a otra alumna y
tiró una computadora contra la pared cuando se molestó durante una
clase, según Shook, quien también había publicado sus comentarios en
Facebook.
Ninguno de los estudiantes ha sido identificado por las autoridades.
El superintendente ha enfatizado que por ley no puede dar detalles del
expediente disciplinario del sospechoso.
El joven tiene su primera cita en la corte este miércoles a las 10:30
am y está detenido bajo dos cargos de agresión agravada con un arma
mortal por el incidente, señaló el fiscal del condado Ellis, Patrick
Wilson, en un comunicado.