Dos personas que no eran universitarios fueron abatidos fatalmente
este viernes en el complejo residencial de la Universidad Central de
Michigan. Funcionarios dijeron que el campus fue cerrado mientras la
policía buscaba a un sospechoso de 19 años que supuestamente está
armado y es peligroso.
La policía del campus cree que el tiroteo «comenzó a raíz de un
problema doméstico», dijo la universidad en un comunicado. No se
reportaron heridos de inmediato. El centro de educación superior, que
tiene unos 23 mil estudiantes, exhortó a los universitarios a
protegerse.
Cerca de las 9:30 horas, la universidad emitió una alerta en las redes
sociales sobre disparos en el Campbell Hall, complejo residencial en
el campus de Mount Pleasant, ubicado a unos 112 kilómetros al norte de
Lansing. La universidad también envió un mensaje telefónico
automatizado a los estudiantes.
El tiroteo ocurrió en el último día de clases antes del receso de
primavera. A los padres que estaban tratando de recoger sus hijos se
les dijo que se alejaran del campus y que fueran a un hotel local,
donde personal universitario los ayudaría.
Halie Byron, de 20 años, dijo que se encerró en su casa, afuera del
campus, a unos 10 minutos a pie del Campbell Hall. Ella tenía planeado
hacer unas cosas antes de viajar a casa, en el área de Detroit.
«Da miedo pensar lo fácil que es que un atacante armado entre a
cualquier parte de un campus universitario: la biblioteca, los
salones. Está demasiado accesible», dijo.
En la comunidad aledaña, a los estudiantes y personal del distrito
escolar de Mount Pleasant se les dijo que no salieran de nueve
instalaciones. No se permitió el ingreso de visitas.
