Mucho se ha hablado acerca de los beneficios del vino, y es que, se ha comprobado que esta bebida puede ayudarnos a relajarnos, combatir las arrugas y hasta prevenir el Alzheimer. Pero eso no es todo, ya que sino conoces la forma correcta de sostener una copa de vino, quedarás con tus invitados como todo un novato. Por ello, hoy te lo vamos a revelar.

El vino es quizás, la bebida más accesible en la actualidad; lo hay para todos los gustos y bolsillos. El hecho de que tu vino sea económico no implica que rompa con toda la etiqueta que gira alrededor de esta bebida insignia.

Esto es lo que necesitas saber la próxima vez que te sirvas un poco de vino en una copa:

1. Si bien, sostener la copa de vino por su frágil tallo puede parecer un poco inseguro, o tal vez irresponsable, es lo correcto, pues harás que tu vino sea más fácil de beber.

2. Los vinos blancos y rosados están destinados a servirse fríos; mientras que los rojos se pueden servir a temperatura ambiente.

3. Cuando sostienes el vino por el tazón de la copa, en lugar del tallo, estarás calentándolo y, por lo tanto, restando valor a la experiencia. Entonces, debes sostener tu copa de vino por el tallo, pellizcándola entre el pulgar, el puntero y los dedos medios. Sus otros dos dedos se acomodarán naturalmente en la base del vaso. También es aceptable sostener la copa de vino en la base con el pulgar y el dedo índice, con el dedo medio debajo de la base para mantenerla firme.

4. Si bien sostener una copa por el tallo mantendrá tu vino a la temperatura adecuada, también hay otra ventaja: no dejará huellas digitales indebidas en todo el tazón.

Llevar una botella de vino a una cena puede parecer una opción obvia para regalar al anfitrión. No obstante, considérala como una segunda opción, ya que podría parecer que es un regalo de último momento.