Durante los próximos días, el cielo volverá a ofrecernos uno de aquellos espectáculos astronómicos que tanta expectación levantan, la observación a simple vista de un cometa que se aproxima al sistema solar. Se trata del C / 2022 E3 ZTF, un cuerpo celeste que -durante el pasado mes de marzo- fue localizado por los responsables de la Instalación Transitoria Zwicky del Instituto de Tecnología de California, cuando se encontraba a 640 millones de kilómetros de distancia.

Ahora, algo más cerca, el cometa empezará a dibujarse en nuestros cielos a medida que se aproxime al Sol y este ejerza su influencia sobre el material que contiene. De la evaporación surgirá una corta cola de polvo, la cual adoptará un aspecto amarillento que emergerá de una coma (o cabellera) verdosa y brillante. Finalmente, una estela larga de iones resaltará la presencia del cometa que empezará a asomar por el norte de la constelación de la Corona Boreal.

En cuanto a su brillo, si su acercamiento se produce con la misma tendencia que hasta ahora, se cree que podrá ser observado a simple vista sin necesidad de ningún artilugio, según ha informado la NASA. No obstante,  el uso de unos prismáticos o de un telescopio mejorarán su contemplación.