Curiosity lleva desde 2012 explorando incansable la superficie de Marte, y aún hoy su labor sigue deparándonos sorpresas. La última es una flor sobre el planeta rojo. Es una flor de piedra cuyo origen es un proceso geológico bastante común, pero no deja de ser algo asombroso.
La flor es muy pequeña. Apenas tiene un centímetro de alto y se asemeja también a un pequeño fragmento de coral. Curiosity la ha encontrado mientras exploraba las laderas de Mountain Sharp, en el crater Gale, el pasado 24 de febrero de 2022. Gracias a sus cámaras MAHLI, el rover ha sido capaz de tomar varias fotos superpuestas en diferentes focales para observar la formación en todo su esplendor.
La NASA no ha ofrecido muchos datos al respecto de esta imagen porque es demasiado nueva y aún habrá que esperar a que los científicos la examinen con más detalle. Las primeras hipótesis apuntan a que se trata de un cristal de diagénesis. Bajo este esotérico nombre se ocultan formaciones rocosas en las que el sedimento se mineraliza formando cristales de formas tan caprichosas como esta.
No es la primera vez que los investigadores descubren una flor de piedra. En 2008 los responsables del rover Spirit ya descubrieron otra a la que bautizaron como la coliflor. En aquella ocasión, la cristalización parecía provenir de silicatos. En esta nueva flor, se cree que los minerales responsables de la formación son sulfatos, pero no habrá confirmación hasta que pueda ser analizada.
Lo importante de estas rocas es que casi con toda probabilidad se formaron en presencia de agua o por la acción de esta. Lo peculiar de las condiciones necesarias para que se formen hace que el descubrimiento sea una oportunidad única para estudiar cómo era Marte hace millones de años, cuando parte de su superficie estaba cubierta de masas de agua en estado líquido.
