Las obras de los muralistas David Alfaro Siqueiros, Clemente Orozco y
el pintor Diego Rivera que sobrevivieron al golpe de Estado, que el 11
de septiembre de 1973 comandó el general Augusto Pinochet contra el
entonces Presidente Salvador Allende, fueron inauguradas ayer en el
Museo de Arte Carrillo Gil.
Se trata de la muestra Orozco, Rivera, Siqueiros. La exposición
pendiente, que reúne 60 obras del legado de los artistas mexicanos y
forman parte de la colección de Carrillo Gil.
“Después de recorrer Sudamérica y Europa, las más de cien piezas,
entre documentos, pinturas, litografías, así como archivos de audio y
video, reproducen la colección de Carrillo Gil que sería inaugurada en
Chile hace 45 años”, dijo a La Razón Carlos Palacios, curador del
proyecto que se inaugura mañana.
El entrevistado agregó que las obras que sobrevivieron al golpe de
Estado llegan al Museo de Arte Carrillo Gil complementadas con
materiales y documentos que explican la coyuntura histórica que
vivieron.
“Es muy importante el aporte que hizo Fernando Gamboa, curador de la
muestra en aquella época que sería exhibida en el Museo Nacional de
Bellas Artes de Santiago de Chile. Gracias a las anotaciones que hizo
en sus diarios y grabaciones de episodios del ataque de los militares
al gobierno de Allende, podemos saber lo que sucedió y vivieron las
obras”, detalló Palacios y añadió que incluso “puso en riesgo su vida,
al tratar de preservar el registro” de las obras.
“El valor político es lo más importante que el valor natural de estas
obras, así se relaciona la historia reciente de Latinoamérica y sus
problemáticas, desde el arte”
Carlos Palacios
Curador
“Estoy triste y angustiado por la horrible situación que sufre el
pueblo chileno, víctima del más horrendo cuartelazo de la historia
moderna de Latinoamérica; víctima del crimen y de la pérdida de
libertad. Estoy también angustiado por el peligro, por la violencia y
por la falta de seguridad que amenaza a cada minuto a la colección de
Carrillo Gil y sus 169 pinturas de Orozco, Rivera y Siqueiros”, se
puede leer en uno de los escritos de Gamboa expuestos en el museo.
La situación de destrucción que vivió Chile en los años setenta,
debido al golpe de Estado, impidió definitivamente que la exposición
se realizara y las 169 obras volvieron a su lugar a México 15 días
después del cuartelazo, metidas en 27 cajas junto a las que también
viajaban 350 exiliados, entre los que se encontraban la viuda y las
hijas del ya entonces asesinado presidente Allende.
Aunque se recuperó la mayor parte del legado, “se perdieron varias
artesanías y libros, la exposición original estaba dividida en tres
salas, sólo se recuperó una, donde está la obra de los tres maestros”,
dijo el curador.
Fue hasta 2015 cuando se recreó la exhibición cancelada en 1973 y se
logró presentar por primera vez en Santiago de Chile para después
presentarse en Buenos Aires, Lima e Italia, antes de regresar a
México, donde las obras sobrevivientes regresan a casa.
“Con esta exposición se puede reeditar la exhibición pendiente desde
1973, incluso se incluye un mapa de cómo estaba organizada”, concluyó
Carlos Palacios.
Otra de las riquezas de la exhibición es que incluye el último texto
que escribió en vida el poeta Pablo Neruda, quien falleció sólo diez
días después de que la muestra se cancelara.
“Me tocó convivir con ellos y participar de la vida y de la luz de
México deslumbrante”, escribió Neruda, en una parte del escrito
dedicado al proyecto original, y que fue editado por la embajada de
México en Chile en los años 70.
El Dato: Entre el legado artístico destacan cuatro litografías del
muralista Siqueiros y siete cuadros cubistas del pintor Diego Rivera.
