Nuevo Laredo, Tamaulipas. — La reparación de la Carretera Nacional sigue siendo un tema crítico que afecta la economía local y el comercio internacional, pero la intervención del diputado federal Carlos Enrique Canturosas Villarreal parece más una estrategia política que un verdadero compromiso con las necesidades de la ciudadanía que lo eligió.

La Carretera Nacional, por donde transitan diariamente 16 mil tráileres con mercancías de exportación e importación, es vital para la economía de Nuevo Laredo, representando más del 40 por ciento del comercio con Estados Unidos. Sin embargo, la situación actual está generando pérdidas económicas y retrasos significativos en las operaciones comerciales.

A pesar de la gravedad del asunto, Canturosas Villarreal, ex alcalde panista y actual diputado federal por MORENA, no tomó la iniciativa en este tema. Su actuación se limitó a unirse a las demandas presentadas por diversos organismos ciudadanos, como el Consejo de Instituciones y la Asociación de Agentes Aduanales, durante una reunión en la Ciudad de México con senadores. Esta falta de acción directa y proactiva ha llevado a muchos a cuestionar su compromiso real con la comunidad que lo apoyó en las urnas.

La reciente participación de los senadores en este asunto ha generado un aire de esperanza, pero también ha sido aprovechada por Canturosas Villarreal como bandera política, lo que ha generado descontento entre los ciudadanos que sienten que sus problemas han sido ignorados durante demasiado tiempo. La realidad es que el diputado parece haber dejado a un lado sus responsabilidades en favor de una actuación tardía y mediática.

La exigencia de la ciudadanía es clara: requieren soluciones efectivas y no promesas vacías. La carretera y su estado crítico demandan atención inmediata, y la comunidad está lista para exigir a sus representantes que actúen en su verdadero interés, y no como meros actores de un espectáculo político.