Nuevo Laredo, Tamaulipas — La administración municipal encabezada por la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas Villarreal enfrenta crecientes críticas por la falta de atención a la obra pública, lo que ha derivado en un alarmante aumento de socavones, hundimientos y baches en diversas calles de la ciudad.
Esta situación no solo afecta la movilidad de los ciudadanos, sino que también pone en riesgo la seguridad de automovilistas y peatones.Los problemas en la infraestructura vial son particularmente evidentes en áreas donde previamente se habían realizado trabajos de rehabilitación de colectores y drenajes.
A pesar de los reportes constantes de los vecinos y comerciantes, las autoridades municipales, en especial la Secretaria de Obras Públicas, han mostrado una preocupante inacción.Un caso emblemático es el socavón ubicado en el crucero de las calles Madero y Aquiles Serdán, en el centro de la ciudad.
Este agujero, que ha estado presente durante varios meses, representa un grave peligro en una zona con alto tráfico. Los residentes han alertado sobre la inminente posibilidad de accidentes automovilísticos, ya que un poste de concreto de la CFE, que se encuentra en estado crítico, podría colapsar en cualquier momento. Las varillas que lo sostienen están visiblemente deterioradas, y un nuevo impacto podría hacer que un vehículo caiga en el socavón.Los habitantes de Nuevo Laredo demandan una solución inmediata a esta situación que, si no se atiende pronto, podría resultar en una tragedia.
La urgencia de mantener y reparar la infraestructura vial es más clara que nunca, y la población espera que la administración de Canturosas cumpla con su responsabilidad de garantizar la seguridad y el bienestar de los neolaredenses.