Al señalar que especialistas del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, (INECC) indicaron que México es uno de los países más vulnerables ante el cambio climático, la Licenciada en Mercadotecnia, Giselle Arellano señaló que esta vulnerabilidad se debe a las características geográficas del país, a las condiciones socioeconómicas y su grado de susceptibilidad o incapacidad para enfrentar los impactos que se presentan debido al calentamiento global y la contaminación.
Destacó que el estudio indica que nuestro país ocupa el décimo segundo lugar a nivel mundial en la emisión de gases de efecto invernadero por quema de combustibles fósiles, por encima de países como Italia y Francia, de acuerdo con datos del INECC quien además informa que la tendencia de aumento es clara desde hace décadas, pero la curva ascendente se vuelve más pronunciada desde 2005 a la fecha, registrando a los últimos seis años como los más calurosos de los que se tiene registro en el país.
En este tenor, Giselle Arellano resaltó, que en un estudio de la Universidad de Notre Dame, se concluye que México es uno de los países más vulnerables al cambio climático, estudio en el que los investigadores han tenido en cuenta factores como la preparación para responder ante fenómenos medioambientales, a su capacidad para enfrentarlos y su adaptación que tienen ante los mismos.
Ante ello, dijo que algunas asociaciones civiles como WWF México, han hecho eco ante tal problemática y afirman que en la zona costera, con el aumento del nivel del mar, estados como Quintana Roo y Yucatán, ya se están viendo afectados tanto en sus playas como en el aumento de temperatura que se registra en los últimos años.
El cambio climático también ha provocado un desplazamiento de zonas cálidas del país donde la flora y fauna ha empezado a migrar, lo que conlleva un desabasto alimenticio para muchas regiones.
Por lo que, para Greenpeace, -agregó Giselle Arellano- son muchos los impactos que se tienen y registran en México debido al cambio climático, el que ha ocasionado, que los aumentos en la temperatura que antes transcurrían a lo largo de diez mil años, ahora se dan en unas pocas décadas, lo que refleja que las consecuencias ya están aquí y desde que se tienen estadísticas; se han detectado aumentos en el nivel del mar de hasta 20 centímetros además de que existe una mayor incidencia de tormentas extremas, sobre todo en costas del Pacífico mexicano.
Resaltó que el aumento de la temperatura del mar incide directamente en el descenso de especies marinas, lo que repercute en todo el ecosistema y en pérdidas para la flota pesquera; la cual en los próximos años, lejos de mejorar se espera que la situación se agrave ya que el aumento de temperatura en México y una disminución en la precipitación pluvial, son factores que afectarán los ecosistemas y especies ligados con climas frescos y húmedos, por lo que las zonas más afectadas son las planicies del centro de México que sufrirán los principales efectos, haciendo que muchas especies migren a las zonas montañosas con climas más favorables.
En esta renglón, Giselle Arellano agregó que hoy el planeta es en promedio 1 grado centígrado más caliente que en tiempos preindustriales, por ello es urgente que México adopte medidas que limiten el aumento de la temperatura ya que este incremento continuará y de llegar a 1.5 grados, provocará un desastre, como la desaparición casi total de los arrecifes de coral, al aumento del nivel del mar en 46 centímetros, acidificación del océano, la caída en la productividad del maíz, arroz o trigo y llevará a que el 37 por ciento de la población mexicana; esté expuesta a calor severo al menos una vez cada 5 años.
Finalizó al resaltar que México será testigo de “impactos importantes” derivados del cambio climático; debido a que es un país con un alto porcentaje de personas en situación de pobreza además de tener una remarcada vulnerabilidad a los distintos impactos del cambio climático como pueden ser lluvias extremas, inundaciones, sequías, ondas de calor a las que estaremos expuestos de aquí al 2030.